Usui Sensei, según está escrito en su lápida memorial, meditó sobre los secretos y misterios de la existencia, exploró diversas técnicas de introspección y rogó incesantemente a los dioses. Se forjó a sí mismo constantemente, sin desalentarse ni siquiera en las más duras pruebas, y al final se transformó tocado por las más profundas visiones, tras su experiencia de Satori en el monte Kurama.
El Reiki-Do o Camino del Reiki, le fue revelado a Usui Sensei y él lo describió como "un camino que todo lo abarca, un sistema ecléctico y profundo que contiene en su esencia elementos del sintoísmo, del buidismo esotérico, del taoísmo, del confucionismo e incluso del cristianismo."
Una vez dijo: "El camino del Reiki que yo practico, tiene espacio para cada uno de los ocho millones de dioses del mundo y yo coopero con cada uno de ellos. El Gran Espíritu que guía al Reiki engloba y disfruta de todo lo que es Divino y de todos los seres iluminados de cada país. Únete a lo Divino y podrás percibir dioses donde quiera que te encuentres. Dios está dentro de todos los seres humanos"
El propósito del Reiki-Do, según lo expresaba Usui Sensei:
- Alcanzar el propósito de vida, consiguiendo llegar al nivel más alto de realización espiritual (la iluminación) a través de la práctica.
- Sentir la unidad con el Ser, volviéndose consciente del verdadero sentido de la existencia humana y siendo parte de la vida universal.
- Dar amor impersonal, extendiendo la vibración del Ser, compartiendo la experiencia, relacionándose con las personas y creciendo juntos.
- Vivir armónicamente, elevando el nivel de vibración y contribuyendo así a la paz mundial y a la felicidad del ser humano
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