REIKI Y LA MEDICINA TRADICIONAL

REIKI EN HOSPITALES
¡Por qué en los hospitales quieren Reiki?

Los hospitales están viviendo cambios importantes. Necesitan reducir gastos pero al mismo tiempo mejorar el cuidado de los pacientes. Bajo el antiguo patrón de medicación y tecnología costosa, esto presenta un dilema sin solución. Pero este no es el caso con Reiki y otras modalidades complementarias. Reiki no requiere tecnología y muchos de sus practicantes ofrecen sus servicios gratuitamente. Como resultado, Reiki es una buena manera de mejorar el cuidado de los pacientes mientras se reducen gastos.

La razón principal de que el programa tenga tanto éxito es que a los pacientes les gusta el Reiki y lo solicitan. Los pacientes disfrutan de la sesión y piden más después de su primera experiencia. Las enfermeras también han notado que Reiki produce efectos positivos en los pacientes, reduciendo el dolor, aumentando la relajación, mejorando el sueño y el apetito.

REIKI COMO COMPLEMENTO A LA MEDICINA CONVENCIONAL

Reiki tiene una serie de ventajas que facilita su uso como complemento a la medicina tradicional.

No es una religión, por lo cual no importan las creencias religiosas de la persona.
El paciente no necesita “creer” en Reiki. Ni siquiera necesita saber el nombre de lo que está recibiendo. Reiki actuá independientemente de las opiniones o puntos de vista de la persona que lo recibe.
No necesita equipos ni instrumentos, facilitando sus uso en cualquier ubicación.
No tiene ningún tipo de conflicto con fármacos o tratamientos, al contrario, suele reducir los efectos secundarios.
No tiene contra indicaciones. Una sesión de Reiki no puede ser perjudicial

Reiki es tan sencillo. No necesita preparación y se puede usar en cualquier lugar del hospital incluyendo cirugía, cuidados intensivos, ambulatorios etc. Se puede utilizar en combinación con cualquier tratamiento. No tiene efectos secundarios ni contra indicaciones. El paciente puede estar sentado, acostado o de pie. Reiki no depende del estado de conciencia de la persona que lo recibe. El paciente puede estar en coma o en cuidados intensivos sin que ello sea un impedimento para los tratamientos de Reiki. Solo unos minutos de Reiki pueden cambiar drásticamente la situación del paciente. El estrés se convierte en paz y el pánico desaparece, por lo cual es muy útil en situaciones de emergencia.

Enfermeras trabajando en unidades de pediatría descubren que los niños responden muy bien al Reiki. Los niños no tienen ideas pre-concebidas sobre la sanación, por lo cual están muy abiertos a esta terapia.