Como ya comenté en el artículo PIEDRAS PARA SANAR, desde el comienzo de los tiempos, la humanidad ha empleado los cristales y las gemas como agentes curativos y protectores. Éstos tienen muchísimas aplicaciones: desde la armonización de ambientes y el despeje de aspectos emocionales y mentales, hasta la protección y guía en la meditación. La relación que se establece con el Reiki es, que este sistema de armonización natural, trabaja de manera holística en el ser, armonizando no sólo la parte física de la persona, sino también sus emociones, la afinidad nace a partir de que ambos trabajan a niveles vibracionales.
Al aplicar las gemas con el Reiki en una sesíón, el receptor manifiesta rápidamente movilizaciones en sus chakras que lo predisponen, de esta forma, a la apertura necesaria para obtener importantes beneficios en lo que respecta a su bienestar y autoconocimiento, logrando mejorías notables. Si bien la aplicación de Reiki por sí sola ya es excelente para lograr una total armonización, ya que pone en marcha múltiples procesos vitales, acompañarlo con técnicas de gemoterapia implica obtener mayores resultados en un periodo menor de tiempo. La aplicación de la terapia con gemas se recomienda para tratar malestares en general y favorecer el crecimiento emocional y espiritual. Es también una excelente terapia complementaria y de apoyo a tratamientos concretos cuando se conoce la verdadera causa de la enfermedad.
Hay muchas formas de combinar Reiki y cristales. Lo más habitual consiste en canalizar energía al principio del tratamiento de gemoterapia para corregir el origen del desajuste o bien incorporar algunos cristales a las sesiones de Reiki.
Aquí tienes algunas indicaciones para experimentar con los cristales:
Al aplicar las gemas con el Reiki en una sesíón, el receptor manifiesta rápidamente movilizaciones en sus chakras que lo predisponen, de esta forma, a la apertura necesaria para obtener importantes beneficios en lo que respecta a su bienestar y autoconocimiento, logrando mejorías notables. Si bien la aplicación de Reiki por sí sola ya es excelente para lograr una total armonización, ya que pone en marcha múltiples procesos vitales, acompañarlo con técnicas de gemoterapia implica obtener mayores resultados en un periodo menor de tiempo. La aplicación de la terapia con gemas se recomienda para tratar malestares en general y favorecer el crecimiento emocional y espiritual. Es también una excelente terapia complementaria y de apoyo a tratamientos concretos cuando se conoce la verdadera causa de la enfermedad.
Hay muchas formas de combinar Reiki y cristales. Lo más habitual consiste en canalizar energía al principio del tratamiento de gemoterapia para corregir el origen del desajuste o bien incorporar algunos cristales a las sesiones de Reiki.
Aquí tienes algunas indicaciones para experimentar con los cristales:
- Coloca una amatista sobre la frente mientras meditas o realizas un autotratamiento de Reiki.
- Sujeta un cristal sobre el pecho mientras realizas una afirmación.
- Introduce gemas bien lavadas en un recipiente con agua, transmitele Reiki y bebe su elixir.
- Antes de acostarte, deja cristales en la ventana para que se purifiquen con la luz de la luna y se nutran con los primeros rayos del sol. Así estarán preparados para usarlos.
- Coloca hematíes bajo la almohada, a fin de estabilizar el cuerpo etéreo mientrs duermes.
- Distribuye pequeñas piedras y cristales de distintos tipos sobre los cakras del receptor.
- Adorna con cristales el espacio que utilizas en las sesiones, para que absorban los elementos negativos del ambiente. Recuerda lavarlos al finalizar el día
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