Frecuentemente
surge en Reiki la pregunta de los “Tiempos”.
¿Cuánto tiempo de práctica continuada he de realizar después de cada iniciación?
¿Qué hago después de los 21 días después de la iniciación?
¿Qué son los 21 días?
¿Cuánto tiempo ha de pasar desde que realizo un nivel al siguiente?
El ser humano ha dado un gran salto evolutivo en los últimos años. Miles y miles de personas practicando Reiki (y otras terapias energéticas) han creado una gran masa crítica que ha facilitado el aprendizaje a todos los que han venido detrás.
Conceptos y prácticas que antaño resultaban complicadas de explicar y entender, ahora se integran con gran facilidad. Los procesos de aprendizaje se han acelerado de tal manera que parece, exagerándolo (o no), que se ha viajado del mundo de las cavernas al de la tecnología avanzada, en un solo día.
Por supuesto esta evolución no ha sido fruto de un día, sino de muchos y continuados, miles y millones de soles y lunas que han transcurrido hasta que el ser humano es hoy capaz de hablar en términos de energía, de comprender en términos de energía, y de incorporar en sus vidas el concepto de energía como lo más natural del mundo.
En este hecho, constatado tanto a través de los practicantes de Reiki como de la gran proliferación de multitud de terapias energéticas, informacionales y de conciencia hoy en día, nos plantean varias cuestiones antes dadas por sentado.
Punto Uno: El practicante de Reiki, debe realizar 21 días de auto tratamiento y práctica continuada después de una iniciación.
Punto Dos: De un nivel de Reiki a otro han de transcurrir unos tiempos mínimos de práctica (en ocasiones de años) entre uno y otro.
¿Cuál es mi el pensamiento al respecto?
“Sobre los
21 Días”:
Sabemos que Mikao Usui, alcanzo el Satori que le llevó a descubrir Reiki, después de 21 días de meditación y ayuno en el monte Kurama.
21 días es el tiempo que necesita el núcleo de una célula para cambiar su información
¿Es correcto 21 días de práctica de auto tratamiento después de un curso?
Rotundamente
Sí. 21, 210, 2100… La esencia de esta práctica recae en el día a día.
Después
de un curso la limpieza energética que se vive es grande, y el cuidado de
nuestro cuerpo (físico y energético) es vital los días posteriores. Además, la
práctica continuada de un ejercicio puede crear un hábito maravilloso.?
Algunas
tradiciones nos hablan de 21 días seguidos, otras de 40, otras de 90. Un
compromiso interno con tu propio camino de sanación y descubrimiento interior
puede ser realizar este tipo de prácticas continuadas durante un tiempo (como
los 21 días); simplemente, maravilloso.
Sin
embargo, nota la importancia de incorporar la práctica de Reiki todos los días
de tu vida. Pueden ser unos pocos minutos de meditación en gasshô antes de
dormir, proteger tu campo energético antes de salir de casa, una pequeña
práctica de auto-tratamiento cada día, verter Reiki a la comida con profunda
gratitud…
Muchas situaciones en nuestro día a día pueden verse beneficiadas al introducir
alguno de los muchos elementos de Reiki.
El
camino espiritual, de crecimiento interior, de descubrimiento, de revelación,
es un camino que no empieza ni acaba en 21 días, ni en 40, ni en 90.
Segundo
a segundo, dirige la mirada hacia el interior, observa tu Luz, y expándela.
“Sobre
los tiempos de paso de un nivel a otro”:
La vida
marca un ritmo exacto para el oído que presta atención. La formación de Reiki
no es volar por la información y la práctica para acumular diplomas y
reconocimiento: “Yo soy de Nivel II” “Yo soy Maestro de Reiki”…
Reiki danza al unísono con la Vida, y si deseamos seguir sus pasos, hemos de poner toda nuestra atención a la melodía. Es sencillo: Mirar hacia dentro.
¿Cuándo
sabe una persona que ha llegado su momento de pasar al siguiente nivel de
formación?: Muy sencillo, lo sabe. Si la pregunta es ¿cuándo puedo pasar al
siguiente nivel?, entonces aún no estás preparado. Si la pregunta es ¿qué día
de los que están en el calendario me viene mejor para mi siguiente iniciación?,
entonces estás preparado.
Escucha
tu propio ritmo. Practica, disfrutando, deleitándote con la magia de la energía
y sus infinitas posibilidades, y cuando llegue el momento de seguir avanzando…
simplemente, cualquier otra opción queda fuera de lugar, se sabe.
Una vez que hayas terminado con las prácticas del nivel correspondiente, déjate llevar por tu propio guía interior. No necesitas límites de tiempos externos prefijados, guíate por tu propia guía interna, y conocerás los tiempos.
Nos
despedimos con un poema del emperador Meiji, que dijo en uno de sus Gyoseis:
“Contempla
la piedra horadada por las gotas de lluvia, aunque el trabajo sea arduo, no
cedas en tu empeño”