Meditación terapeútica para un corazón tranquilo

Esta meditación abre la conciencia de la respiración y tonifica los pulmones y el corazón. Se trata de una meditación terapéutica de gran valor.

“Relájese y concéntrese entonando: Ong Namo, Guru Deve Namo 3 veces.

Postura: siéntese en la postura fácil o en una silla, con la espalda recta.

Concentración: cierre los ojos o mire hacia adelante con los ojos medio abiertos.

Respiración: concéntrese en el flujo de la respiración. Regule de forma consciente cada elemento de la respiración. Inspire lenta y profundamente por ambos orificios nasales. A continuación, retenga la respiración dejando el pecho suspendido. Manténgase tanto tiempo como pueda sin respirar. Después espire a través de la nariz de forma suave y gradual dejando escapar todo el aire. Cuando haya espirado totalmente el aire, aguante sin volver a inspirar cuanto más mejor.

Mantra: esta meditación terapéutica se realiza sin mantra.

Mudra: coloque la mano izquierda en el centro del pecho a la altura del centro del corazón. La palma debe quedar plana sobre el pecho con los dedos en horizontal y señalando hacia la derecha. La mano derecha como si fuera a prestar juramento. Mantenga la palma de la mano hacia delante, el codo relajado cerca del torso y el antebrazo en posición perpendicular al suelo.

Tiempo: de 3 a 5 minutos
Final: inspire y espire con fuerza 3 veces.

COMENTARIO: la sede adecuada para la fuerza sutil del prana se encuentra en los pulmones y en el corazón. La palma izquierda se coloca en la sede natural del prana. Cree una profunda calma en ese punto. La mano derecha, que controla la acción y el análisis, realiza un mudra receptivo y relajado y se encuentra en la posición de paz. Toda la postura induce un sentimiento de tranquilidad. Esta meditación terapéutica crea técnicamente un punto tranquilo para el prana y el centro del corazón.Desde un punto de vista emocional, añade una clara percepción sobre las relaciones con nosotros mismos y con los demás. Si se sintiera incómodo en su trabajo o con una relación personal, siéntese y haga esta meditación entre 3 y 5 minutos antes de decidir cómo actuar. Después actúe de todo corazón.

Fuente | Meditación Terapéutica del Doctor Dharma Singh

HABLALE A TUS CÉLULAS

Si acaso, mi amigo, tu salud flaquea,
¡háblale a tus células con honda emoción!:
pídeles que cumplan bien con su tarea,
y que restablezcan su óptima función.

Espero que este video te guste tanto como a mí y te ayude en tu sanación.

LAS CUATRO LEYES DE LA ESPIRITUALIDAD

En la India se enseñan las “Cuatro Leyes de la Espiritualidad”.

La primera ley dice: "La persona que llega a tu vida es la persona correcta”. Nadie llega a nuestra vida por casualidad. Todas las personas que nos rodean, y que interactúan con nosotros, están allí por algo, para hacernos aprender y avanzar en cada situación.

La segunda ley dice: "Lo que sucede es lo único que podía haber sucedido”.Nada, absolutamente nada de lo que nos sucede en nuestras vidas podría haber sido de otra manera. Ni siquiera el detalle más insignificante. No existe el: “si hubiera hecho tal cosa, hubiera sucedido tal otra”. No. Lo que pasó fue lo único que pudo haber pasado, y tuvo que ser así para que aprendamos esa lección y sigamos adelante. Todas y cada una de las situaciones que nos suceden en la vida son perfectas, aunque nuestra mente y nuestro ego se resistan y no quieran aceptarlas.

La tercera ley dice: "En cualquier momento que comience es el momento correcto”.Todo comienza en el momento indicado, ni antes, ni después. Cuando estamos preparados para que algo nuevo empiece en nuestras vidas, es entonces cuando comenzará.

Y la cuarta ley dice: "Cuando algo termina, termina”.
Simplemente es así. Si algo ya terminó en nuestras vidas, porque es lo mejor para nuestra evolución, debemos agradecer todo lo que nos ha enseñado y dejarlo ir. Debemos seguir adelante, enriquecidos con la experiencia, y dejarlo ir con amor. Por eso no es casual que estés leyendo ahora este texto. Si llega a tu vida hoy es porque estás preparado para entender que ningún copo de nieve cae nunca en el lugar equivocado.

¡Vive bien, ama con todo tu ser y se inmensamente feliz!