2013/04/29

GENERANDO FELICIDAD

 
Aprende a sentarte en calma y reunirte contigo mismo con tranquilidad. La paz vendrá y se sentará a tu lado.

Vive con sencillez. Eso significa sólo tomar lo que necesitas de la tierra y de la vida. La recompensa es la abundancia.

Permanece liviano. Aplica un punto final a las preocupaciones en un instante. Cuando decides vivir con liviandad en tus pensamientos y acciones, los demás te ven brillar.

Vive ahora. Disfruta de vivir el momento presente, olvida la negatividad, el desperdicio y los arrepentimientos del pasado. La positividad es el primer paso hacia la paz.

Da generosamente, de todo lo que tienes. Compartir tus regalos con los demás, sin contar su coste, garantiza que recibirás incluso más.

Practica la compasión. Encuentra el perdón. Primero para ti mismo. Después aprende que el perdón derrama bendiciones en todas las direcciones. Al perdonar a los demás, somos perdonados y sanados.

Agradece. Sé agradecido por todo lo que has recibido. La gratitud le da valor a todo lo que posees y aumenta tu alegría.

Sé amigo del silencio. Dirige tus pensamientos hacia tu interior, hacia tu esencia más profunda. El silencio invita a Dios a tu corazón y mente.

Sirve a los demás. Disfruta con servir. Pensar y actuar sólo para nosotros trae una recompensa hueca; servir a los demás crea un profundo pozo de satisfacción.

Practica la paz. La paz es la cualidad original del ser. En su forma más pura, la paz es silencio interior. Consiste en pensamientos positivos, sentimientos puros y buenos deseos. Para tener paz necesitas paciencia. Cuando eres pacífico, creas una atmósfera de paz. La paz en el mundo sólo se puede conseguir cuando haya paz en la mente de cada ser humano.

Hay felicidad cuando se usa cada momento de una manera valiosa. La felicidad es la nutrición que más fortalece. Con felicidad, haces fácil lo difícil, y liviano lo que es pesado. Permanecer feliz y compartir felicidad con los demás es un gran acto de caridad. Cuando eres feliz, no importa lo que suceda. Nunca sueltes tu felicidad.
 

2013/04/21

CLAVES DEL CONTENTAMIENTO INTERIOR




En el tiempo presente, la tensión y la intranquilidad están aumentando en el mundo y, debido a esto, el descontento también aumenta. En estos momentos, la habilidad espiritual de permanecer contento y satisfecho y cooperar para que los demás también lo estén es muy necesario.

En primer lugar, necesitamos desarrollar el arte de permanecer contentos con nosotros mismos. La clave del contentamiento interior esstá en centrarnos en el resultado de los logros espirituales y no materiales o externos. Los logros que vienen de las circunstancias o las posesiones son siempre de carácter temporal y por tanto no pueden de ninguna manera proporcionar un contentamiento permanente.

Los logros espirituales,  sí son permanentes. Progresar en el conocimiento espiritual, en desarrollar y fortalecer nuestra paz, nuestra estabilidad, nuestra positividad frente a los desafíos de la vida, nuestra capacidad de compartir amor incondicional, todos estos logros incrementan nuestra satisfacción y auto-respeto.

Cualquier sentimiento de carencia trae consigo una disminución del contentamiento. Junto a llenarnos de logros espirituales, también es esencial permanecer más allá de los deseos limitados, los deseos de la mente que nos atrapan en la ilusión de que nos van a proporcionar una satisfacción verdadera, cuando lo único que hacen es crear dependencia e incluso adicción.

Cuando nos llenamos de logros espirituales podremos experimentar el contentamiento de forma estable. La satisfacción será visible a través de la cara. Y cuando estamos contentos en nuestro interior, de forma automática surgen la motivación y el entusiasmo por beneficiar a otros, por capacitarles a que también tengan logros espirituales.
 
B.K

2013/04/16

Somos actores en un escenario



Hacerse consciente del alma significa tener claro la diferencia entre el instrumento físico, el traje, el vehículo, es decir, el cuerpo, y la energía consciente que lo gobierna, el alma, el ser.

Del mismo modo, es esencial comprender la diferencia entre quién soy realmente y el rol o roles que estoy interpretando en mi vida.

Un actor, incluso mientras está interpretando las escenas más dramáticas, incluso mientras llora o ríe o grita, sabe que está interpretando un papel y que él no es el papel. Sabe que cuando la obra se acabe de representar, seguirá existiendo sin el papel.

Podemos desarrollar una gran fortaleza si, de la misma manera, mientras interpretamos diferentes roles en el escenario del mundo, permanecemos conectados con la consciencia interna de nuestra identidad eterna, como el ser de consciencia pura – de paz, de verdad, de luz, de amor.

Separar al rol y al actor hace que aumenten las oportunidades de ver lo que mi papel precisa realmente y reduce la posibilidad de ser influenciado en exceso por los demás. Si soy capaz de proteger mi identidad interior, será mucho más fácil para mí, cambiar de rol. Si me pierdo en algún rol en particular, no puedo ver más allá de las necesidades inmediatas.

Por ejemplo, puede que se requiera de alguien que interprete el papel de madre, o de esposa o esposo, o de mujer u hombre  de carrera, o de trabajadora comunitaria, o de amiga, de amigo. Siempre tendremos muchas más probabilidades de satisfacer todos estos roles si no nos atrapamos excesivamente en ninguno de ellos.

La meditación puede compararse con el momento en el que nos permitimos dejar el escenario del mundo, incluso por unos momentos, y conectar con nuestra esencia. Separarnos del escenario temporalmente nos permite comprender con mayor profundidad el comportamiento de los demás actores y qué es lo que se requiere de mí para poder interpretar mi papel con precisión.

No cortamos con el papel, pero dándonos a nosotros mismos de vez en cuando oportunidades para recargarnos, nos aseguramos de que nuestra perspectiva permanezca elevada, de que nuestras motivaciones sean positivas y de que nuestro estado interno sea pacífico y equilibrado.

B.K.